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Hebreos 9:11-16 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

11. Pero cuando Cristo apareció como Sumo Ssacerdote de los bienes futuros, a través de un mayor y más perfecto tabernáculo, no hecho con manos, es decir, no de esta creación,

12. entró al Lugar Santísimo una vez para siempre, no por medio de la sangre de machos cabríos y de becerros, sino por medio de Su propia sangre, obteniendo redención eterna.

13. Porque si la sangre de los machos cabríos y de los toros, y la ceniza de la novilla, rociadas sobre los que se han contaminado, santifican para la purificación de la carne,

14. ¿cuánto más la sangre de Cristo, quien por el Espíritu eterno El mismo se ofreció sin mancha a Dios, purificará nuestra conciencia de obras muertas para servir al Dios vivo?

15. Por eso Cristo es el mediador de un nuevo pacto (testamento), a fin de que habiendo tenido lugar una muerte para la redención de las transgresiones que se cometieron bajo el primer pacto (testamento), los que han sido llamados reciban la promesa de la herencia eterna.

16. Porque donde hay un testamento, necesario es que ocurra la muerte del testador.

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