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Salmos 68:3-17 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

3. Pero alégrense los justos, regocíjense delante de Dios; Sí, que rebosen de alegría.

4. Canten a Dios, canten alabanzas a Su nombre; Abran paso al que cabalga por los desiertos, Cuyo nombre es el SEÑOR; regocíjense delante de El.

5. Padre de los huérfanos y defensor de las viudas Es Dios en Su santa morada.

6. Dios prepara un hogar para los solitarios; Conduce a los cautivos a prosperidad; Sólo los rebeldes habitan en una tierra seca.

7. Oh Dios, cuando saliste al frente de Tu pueblo, Cuando marchaste por el desierto, (Selah)

8. Tembló la tierra; También se derramaron los cielos ante la presencia de Dios; El Sinaí mismo tembló delante de Dios, el Dios de Israel.

9. Tú esparciste lluvia abundante, oh Dios, Tú fortaleciste Tu heredad cuando estaba extenuada.

10. Los de Tu pueblo se establecieron en ella; En Tu bondad, oh Dios, proveíste para el pobre.

11. El Señor da la palabra; Las mujeres que anuncian las buenas nuevas son gran multitud:

12. "Los reyes de los ejércitos huyen; sí huyen, Y la que se queda en casa repartirá el botín."

13. Cuando ustedes se acuestan en los rediles, Son como alas de paloma cubiertas de plata, Y sus plumas de oro resplandeciente.

14. Cuando el Omnipotente dispersó allí a los reyes, Nevaba en el Monte Salmón.

15. Monte de Dios es el Monte de Basán; Monte de muchos picos es el Monte de Basán.

16. ¿Por qué miran con envidia, oh montes de muchos picos, Al monte que Dios ha deseado para morada Suya? Ciertamente el SEÑOR habitará allí para siempre.

17. Los carros de Dios son miríadas, millares de millares; El Señor está entre ellos en santidad, como en el Sinaí.

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