Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Salmos 44:20-26 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

20. Si nos hubiéramos olvidado del nombre de nuestro Dios, O extendido nuestras manos a un dios extraño,

21. ¿No se habría dado cuenta Dios de esto? Pues El conoce los secretos del corazón.

22. Pero por causa Tuya nos matan cada día; Se nos considera como ovejas para el matadero.

23. ¡Despierta! ¿Por qué duermes, Señor? ¡Levántate! No nos rechaces para siempre.

24. ¿Por qué escondes Tu rostro Y te olvidas de nuestra aflicción y de nuestra opresión?

25. Porque nuestra alma se ha hundido en el polvo; Nuestro cuerpo está pegado a la tierra.

26. ¡Levántate! Sé nuestra ayuda, Y redímenos por amor de Tu misericordia.

Leer capítulo completo Salmos 44