Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Salmos 119:108-120 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

108. Te ruego aceptes las ofrendas voluntarias de mi boca, oh SEÑOR, Y enséñame Tus ordenanzas.

109. En peligro continuo está mi vida, Con todo, no me olvido de Tu ley.

110. Los impíos me han tendido lazo, Pero no me he desviado de Tus preceptos.

111. Tus testimonios he tomado como herencia para siempre, Porque son el gozo de mi corazón.

112. He inclinado mi corazón para cumplir Tus estatutos Por siempre, y hasta el fin.

113. Sámec. Aborrezco a los hipócritas, Pero amo Tu ley.

114. Tú eres mi escondedero y mi escudo; En Tu palabra espero.

115. Apártense de mí, malhechores, Para que guarde yo los mandamientos de mi Dios.

116. Sostenme conforme a Tu promesa, para que viva, Y no dejes que me avergüence de mi esperanza.

117. Sostenme, para estar seguro, Y que continuamente preste atención a Tus estatutos.

118. Has rechazado a todos los que se desvían de Tus estatutos, Porque su engaño es en vano.

119. Como basura has quitado de la tierra a todos los impíos, Por tanto amo Tus testimonios.

120. Mi carne se estremece por temor a Ti, Y de Tus juicios tengo miedo.

Leer capítulo completo Salmos 119