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Salmos 10:1-12 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

1. ¿Por qué, oh SEÑOR, Te mantienes alejado, Y Te escondes en tiempos de tribulación?

2. Con arrogancia el impío acosa al afligido; ¡Que sea atrapado en las trampas que ha preparado!

3. Porque del deseo de su corazón se gloría el impío, Y el codicioso maldice y desprecia al SEÑOR.

4. El impío, en la arrogancia de su rostro, no busca a Dios . Todo su pensamiento es: "No hay Dios."

5. Sus caminos prosperan en todo tiempo; Tus juicios, oh Dios, están en lo alto, lejos de su vista; A todos sus adversarios los desprecia.

6. Dice en su corazón: "No hay quien me mueva; Por todas las generaciones no sufriré adversidad."

7. Llena está su boca de blasfemia, engaño y opresión; Bajo su lengua hay malicia e iniquidad.

8. Se sienta al acecho en las aldeas, En los escondrijos mata al inocente; Sus ojos espían al desvalido.

9. Acecha en el escondrijo como león en su guarida; Acecha para atrapar al afligido, Y atrapa al afligido arrastrándolo a su red.

10. Se agazapa, se encoge, Y los desdichados caen en sus garras.

11. El impío dice en su corazón: "Dios se ha olvidado; Ha escondido Su rostro; nunca verá nada."

12. Levántate, oh SEÑOR; alza, oh Dios, Tu mano. No Te olvides de los pobres.

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