Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Proverbios 8:33-36 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

33. Escuchen la instrucción y sean sabios, Y no la desprecien.

34. Bienaventurado el hombre que me escucha, Velando a mis puertas día a día, Aguardando en los postes de mi entrada.

35. Porque el que me halla, halla la vida Y alcanza el favor del SEÑOR.

36. Pero el que peca contra mí, a sí mismo se daña; Todos los que me odian, aman la muerte."

Leer capítulo completo Proverbios 8