Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Proverbios 18:4-18 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

4. Aguas profundas son las palabras de la boca del hombre; Arroyo que fluye, la fuente de la sabiduría.

5. No es bueno mostrar preferencia por el impío, Para ignorar al justo en el juicio.

6. Los labios del necio provocan riña, Y su boca llama a los golpes.

7. La boca del necio es su ruina, Y sus labios una trampa para su alma.

8. Las palabras del chismoso son como bocados deliciosos, Y penetran hasta el fondo de las entrañas.

9. También el que es negligente en su trabajo Es hermano del que destruye.

10. El nombre del SEÑOR es torre fuerte, A ella corre el justo y está a salvo.

11. La fortuna del rico es su ciudad fortificada, Y como muralla alta en su imaginación.

12. Antes de la destrucción el corazón del hombre es altivo, Pero a la gloria precede la humildad.

13. El que responde antes de escuchar, Cosecha necedad y vergüenza.

14. El espíritu del hombre puede soportar su enfermedad, Pero el espíritu quebrantado, ¿quién lo puede sobrellevar?

15. El corazón del prudente adquiere conocimiento, Y el oído del sabio busca el conocimiento.

16. La dádiva del hombre le abre camino Y lo lleva ante la presencia de los grandes.

17. Justo parece el primero que defiende su causa Hasta que otro viene y lo examina.

18. La suerte pone fin a los pleitos Y decide entre los poderosos.

Leer capítulo completo Proverbios 18