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Jeremías 11:1-16 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

1. Esta es la palabra que vino a Jeremías de parte del SEÑOR:

2. "Oigan las palabras de este pacto, y díganlas a los hombres de Judá y a los habitantes de Jerusalén.

3. "Les dirán: 'Así dice el SEÑOR, Dios de Israel: "Maldito el hombre que no obedezca las palabras de este pacto

4. que mandé a sus padres el día que los saqué de la tierra de Egipto, del horno de hierro, y les dije: 'Escuchen Mi voz (Obedézcanme), y hagan conforme a todo lo que Yo les mando; y ustedes serán Mi pueblo, y Yo seré su Dios,'

5. para confirmar el juramento que juré a sus padres, de darles una tierra que mana leche y miel, como lo es hoy."'" Entonces respondí: "Amén, SEÑOR."

6. Y el SEÑOR me dijo: "Proclama todas estas palabras en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén, diciendo: 'Oigan las palabras de este pacto y cúmplanlas.

7. 'Porque bien advertí a sus padres el día que los hice subir de la tierra de Egipto, y hasta hoy los he amonestado con insistencia, diciéndoles: "Escuchen Mi voz (Obedézcanme)."

8. 'Pero no escucharon ni inclinaron su oído, sino que cada cual anduvo en la terquedad de su malvado corazón. Por tanto, hice caer sobre ellos todas las palabras de este pacto, que Yo les mandé cumplir y no lo cumplieron.'"

9. Entonces el SEÑOR me dijo: "Se ha descubierto una conspiración entre los hombres de Judá y entre los habitantes de Jerusalén.

10. "Se han vuelto a las iniquidades de sus antepasados, los cuales rehusaron escuchar Mis palabras, y se han ido tras otros dioses para servirlos. La casa de Israel y la casa de Judá han violado Mi pacto, el cual hice con sus padres."

11. Por tanto, así dice el SEÑOR: "Yo traigo sobre ellos una calamidad de la que no podrán escapar; aunque clamen a Mí, no los escucharé.

12. "Entonces irán las ciudades de Judá y los habitantes de Jerusalén, y clamarán a los dioses a quienes queman incienso, pero ellos ciertamente no podrán salvarlos en la hora de su aflicción.

13. "Porque según el número de tus ciudades son tus dioses, oh Judá, y según el número de las calles de Jerusalén, son los altares que has levantado a lo vergonzoso, altares para quemar incienso a Baal.

14. "Pero tú no ruegues por este pueblo, ni eleves clamor ni oración por ellos; porque no escucharé cuando clamen a Mí a causa de su aflicción.

15. "¿Qué derecho tiene Mi amada en Mi casa Cuando ha hecho tantas cosas malas? ¿Puede la carne consagrada quitar de ti tu calamidad Para que puedas regocijarte?"

16. "Olivo frondoso, hermoso en fruto y forma," Te puso por nombre el SEÑOR. Con ruido de un gran estrépito Ha prendido fuego en él, Y sus ramas son inservibles.

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