Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Isaías 50:2 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

¿Por qué cuando vine no había nadie, Y cuando llamé no había quien respondiera? ¿Acaso es tan corta Mi mano que no puede rescatar, O no tengo poder para librar? Con Mi reprensión seco el mar, Convierto los ríos en desierto. Sus peces huelen mal por falta de agua, Mueren de sed.

Leer capítulo completo Isaías 50

Ver Isaías 50:2 en contexto