Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

1 Samuel 28:4-14 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

4. Así que los Filisteos se reunieron, fueron y acamparon en Sunem; y Saúl reunió a todo Israel y acamparon en Gilboa.

5. Al ver Saúl el campamento de los Filisteos, tuvo miedo y su corazón se turbó en gran manera.

6. Y Saúl consultó al SEÑOR, pero el SEÑOR no le respondió ni por sueños, ni por Urim, ni por profetas.

7. Entonces Saúl dijo a sus siervos: "Búsquenme una mujer que sea adivina para ir a consultarla." Y sus siervos le dijeron: "Hay una mujer en Endor que es adivina."

8. Saúl se disfrazó poniéndose otras ropas y fue con dos hombres. Llegaron de noche a ver a la mujer, y él dijo: "Te ruego que evoques por mí a un espíritu, y que hagas subir al que yo te diga."

9. Pero la mujer le dijo: "Usted sabe lo que Saúl ha hecho, cómo ha echado de la tierra a los que son adivinos y espiritistas. ¿Por qué, pues, pone trampa contra mi vida para hacerme morir?"

10. Saúl le juró por el SEÑOR: "Vive el SEÑOR que ningún castigo vendrá sobre ti por esto."

11. Entonces la mujer dijo: "¿A quién debo hacerle subir?" Y él respondió: "Tráeme a Samuel."

12. Cuando la mujer vio a Samuel, clamó a gran voz; y la mujer le dijo a Saúl: "¿Por qué me ha engañado? ¡Usted es Saúl!"

13. "No temas; pero, ¿qué ves?" le dijo el rey. Y la mujer respondió a Saúl: "Veo a un ser divino subiendo de la tierra."

14. "¿Qué aspecto tiene?" le dijo él. Y ella dijo: "Un anciano sube, y está envuelto en un manto." Y Saúl supo que era Samuel, e inclinando su rostro a tierra, se postró ante él.

Leer capítulo completo 1 Samuel 28