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Hechos 13:23-35 La Biblia Traducción Interconfesional Versión Española (BTI)

23. Y Dios, de acuerdo con su promesa, hizo surgir de su linaje un salvador para Israel, Jesús.

24. Previamente Juan, como precursor, proclamó un bautismo que sirviera como señal de conversión para todo el pueblo israelita.

25. Próximo ya el final de su carrera, decía Juan: “¿Quién pensáis que soy? Por supuesto no el que esperáis, pues ni siquiera soy digno de desatar el calzado a quien viene después de mí”.

26. Hermanos, los que sois descendientes de Abrahán y los que, sin serlo, viven entre vosotros rindiendo culto a Dios: ved que a nosotros se nos ha confiado este mensaje de salvación.

27. Los ciudadanos de Jerusalén y sus gobernantes no reconocieron a Jesús y lo condenaron, cumpliendo así los anuncios de los profetas, que todos los sábados se leen en la sinagoga.

28. Y sin hallar en él causa alguna de muerte, lo entregaron a Pilato para que mandara ajusticiarlo.

29. Y cuando llevaron a cabo todo lo que estaba escrito sobre él, lo bajaron del madero y lo depositaron en un sepulcro.

30. Pero Dios lo resucitó triunfante de la muerte.

31. Él después se apareció durante un buen número de días a quienes lo habían acompañado desde Galilea a Jerusalén. Ellos son ahora sus testigos ante el pueblo.

32. En cuanto a nosotros, estamos aquí para anunciaros la buena nueva referente a la promesa que Dios hizo a nuestros antepasados,

33. y que ahora ha cumplido en favor de nosotros, sus hijos, resucitando a Jesús, como está escrito en el salmo segundo: Tú eres mi hijo; hoy te he engendrado.

34. Que Dios lo resucitó triunfante de la muerte, de modo que jamás pueda ya experimentar la corrupción, está así afirmado en la Escritura: Os cumpliré las firmes promesas que hice a David.

35. Y en otro lugar lo confirma: No permitirás que tu fiel servidor sufra la corrupción.

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