1. Al maestro del coro. Según “No destruyas”. Poema de David. Cuando Saúl envió a vigilar su casa para matarlo.
2. Dios mío, líbrame de mis enemigos,protégeme de mis agresores;
3. líbrame de los malhechores,sálvame de los sanguinarios
4. que están acechando mi vida.Me atacan, Señor, los poderosossin que yo haya cometido falta ni pecado;
5. corren y se preparan contra mísin que yo tenga culpa alguna.¡Despierta, sal a mi encuentro, mírame!
6. Tú, Señor, Dios del universo, Dios de Israel,decídete a castigar a las naciones,no te apiades de ningún traidor. [Pausa]
7. Al atardecer regresan,aúllan como perros,rondan por la ciudad.
8. Mira, ladran con sus bocas,hay espadas en sus labios:“¿Quién puede oírnos?”.
9. Pero tú, Señor, te ríes de ellos,te burlas de todas las naciones.