22. Luego Jirán mandó decir a Salomón:— He recibido tu petición. Yo te prepararé toda la madera de cedro y de pino que quieras.
23. Mis servidores la bajarán desde el Líbano hasta el mar y haré que la transporten en almadías por el mar al lugar que me indiques. Allí desatarán las almadías y luego los tuyos se encargarán de acarrearla. Tú, por tu parte, me corresponderás, abasteciendo mi palacio de alimentos.
24. Jirán dio a Salomón toda la madera de cedro y de pino que quiso
25. y Salomón, por su parte, entregó a Jirán unas cuatro mil quinientas toneladas de trigo para alimento de su palacio y noventa hectólitros de aceite puro de oliva. Esto era lo que Salomón pagaba anualmente a Jirán.
26. El Señor, pues, concedió sabiduría a Salomón, tal como le había prometido. Jirán y Salomón vivieron en paz y firmaron un tratado.
27. Salomón decretó un reclutamiento de trabajo obligatorio por todo Israel: reclutó a treinta mil hombres
28. y los envió al Líbano en turnos de diez mil por mes. Así, pasaban un mes en el Líbano y dos meses en casa. Adonirán estaba al mando del trabajo obligatorio.
29. Salomón tenía, además, setenta mil acarreadores y ochenta mil canteros en la montaña,
30. sin contar los tres mil trescientos capataces que tenía en las obras para supervisar a los trabajadores.
31. El rey mandó extraer bloques de piedra de buena calidad para cimentar el Templo con piedras labradas.