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Mateo 9:28-35 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

28. Cuando entró a la casa, los ciegos se le acercaron y Jesús les dijo: —¿Ustedes creen que yo puedo hacer que recobren la vista? Ellos respondieron: —¡Sí Señor, creemos!

29. Entonces Jesús les tocó los ojos y dijo: —Que les suceda tal como ustedes creen.

30. Los hombres recuperaron la vista y Jesús les advirtió muy seriamente: —No dejen que nadie se entere de esto.

31. Pero ellos se fueron y difundieron la fama de Jesús por toda la región.

32. Cuando los dos hombres estaban saliendo, llegaron otros con un mudo que estaba atormentado por un demonio.

33. Jesús hizo que el demonio saliera y el hombre comenzó a hablar. La multitud se asombraba y decían: —Nunca hemos visto algo así en Israel.

34. Pero los fariseos decían: —Él expulsa demonios porque el jefe de los demonios le da poder para hacerlo.

35. Jesús recorría todos los pueblos y aldeas, enseñando en las sinagogas proclamando el nuevo mensaje del reino y sanando toda clase de enfermedades y dolencias.

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