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Lucas 23:40-55 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

40. Pero el otro criminal lo reprendió y le dijo: —¿Es que no tienes temor de Dios? ¿Acaso no estás bajo la misma sentencia?

41. Tú y yo merecemos morir por lo que hicimos, pero este hombre no ha hecho nada malo.

42. Luego le dijo: —Jesús, acuérdate de mí cuando comiences a reinar.

43. Entonces Jesús le dijo: —Te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraíso.

44. Era alrededor del mediodía, y toda la tierra quedó sumida en oscuridad hasta las tres de la tarde.

45. El sol dejó de brillar y la cortina del templo se rompió en dos.

46. Y dando un fuerte grito Jesús dijo: —¡Padre, te entrego mi espíritu! Después de decir esto, murió.

47. Cuando el capitán vio lo que había pasado, alabó a Dios diciendo: —Este hombre sí era inocente.

48. Mucha gente había salido de la ciudad para ver esto. Cuando vieron lo que había pasado, se fueron abrumados de dolor.

49. Los amigos de Jesús también estaban allí, incluso las mujeres que lo habían seguido desde Galilea. Todos ellos presenciaban de lejos lo que pasaba.

50. Estaba allí un hombre llamado José, miembro del Consejo. Era un hombre de buen corazón que obedecía a Dios

51. y no había estado de acuerdo con lo que habían decidido ni con las medidas que tomaron. Era del pueblo de Arimatea en Judea, y quería que viniera el reino de Dios.

52. Fue a Pilato y le pidió el cuerpo de Jesús.

53. Bajó el cuerpo de la cruz y lo envolvió en una sábana. Después lo llevó y lo puso en un sepulcro cavado en la roca, donde todavía no se había enterrado a nadie.

54. Era el día de la preparación viernes y el día de descanso estaba a punto de comenzar.

55. Las mujeres que habían venido con Jesús desde Galilea siguieron a José. Vieron el sepulcro y cómo pusieron el cuerpo adentro.

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