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Lucas 22:38-50 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

38. Los seguidores dijeron: —Mira Señor, aquí hay dos espadas. Jesús les dijo: —¡Basta ya!

39. Como de costumbre, Jesús salió de la ciudad al monte de los Olivos, y sus seguidores fueron con él.

40. Al llegar ahí, les dijo: —Oren para que no caigan en tentación.

41. Entonces Jesús se alejó un poco de ellos, se arrodilló y oró:

42. «Padre, líbrame de esta copa, pero que no se haga mi voluntad, sino la tuya».

43. Entonces apareció un ángel del cielo que fue enviado para darle fuerzas.

44. Él estaba sufriendo mucho y oraba con fervor. El sudor era como gotas de sangre que caían al suelo.

45. Cuando Jesús terminó de orar, fue a donde estaban sus seguidores. Se quedaron dormidos vencidos de tristeza.

46. Jesús les dijo: —¿Por qué están durmiendo? ¡Levántense y oren para que no caigan en tentación!

47. Mientras Jesús estaba hablando, llegó allí mucha gente. Los guiaba uno de los doce apóstoles, llamado Judas. Él se acercó a Jesús para saludarlo con un beso.

48. Pero Jesús le dijo: —Judas, ¿Con un beso traicionas al Hijo del hombre?

49. Cuando los seguidores vieron lo que estaba pasando, le dijeron a Jesús: —Señor, ¿atacamos con espada?

50. Uno de ellos le pegó al siervo del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha.

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