1. Jesús levantó la mirada y vio a los ricos poniendo sus ofrendas en la caja del dinero del templo.
2. También vio a una viuda pobre que estaba dando dos pequeñas monedas de cobre como ofrenda.
3. Entonces Jesús dijo: —En verdad les digo que esta pobre viuda dio más que todos los demás.
4. Porque todos ellos dieron de lo que les sobraba, pero ella, a pesar de su pobreza, entregó todo lo que tenía para vivir.
5. Algunos de los seguidores estaban hablando de que el templo estaba adornado con piedras hermosas y ofrendas,
6. pero Jesús dijo: —Llegará la hora en que todo lo que ven aquí será destruido. No quedará piedra sobre piedra, todo se vendrá abajo.