9. Aunque teníamos el derecho de pedirles ayuda, siempre trabajamos para servirles de ejemplo.
10. Cuando estuvimos con ustedes, les dimos esta orden: «El que no trabaje, que no coma».
11. Hemos escuchado que algunos de ustedes no quieren trabajar y no se ocupan en nada; no se preocupan por trabajar, sino por estar pendientes de los demás.
12. A esos les ordenamos en el nombre del Señor Jesucristo que dejen de molestar a los demás y que se dediquen a trabajar para conseguir su comida y sustento.
13. Pero ustedes hermanos, nunca se den por vencidos de hacer el bien.
14. Si alguien no obedece lo que les decimos en esta carta, fíjense bien quién es y apártense de él para que le dé vergüenza.
15. Pero no lo traten como a un enemigo, más bien corríjanlo como a un hermano.
16. Que el Señor de paz les dé paz en todo momento y de toda manera. Que el Señor esté con todos ustedes.