12. A esos les ordenamos en el nombre del Señor Jesucristo que dejen de molestar a los demás y que se dediquen a trabajar para conseguir su comida y sustento.
13. Pero ustedes hermanos, nunca se den por vencidos de hacer el bien.
14. Si alguien no obedece lo que les decimos en esta carta, fíjense bien quién es y apártense de él para que le dé vergüenza.
15. Pero no lo traten como a un enemigo, más bien corríjanlo como a un hermano.
16. Que el Señor de paz les dé paz en todo momento y de toda manera. Que el Señor esté con todos ustedes.
17. Como en todas mis cartas, yo, Pablo, escribo este saludo de mi puño y letra para demostrar que en realidad la carta es mía.
18. Que nuestro Señor Jesucristo los bendiga en abundancia a todos ustedes.