63. Los jóvenes fueron consumidos por el fuego y no hubo canciones de bodas para sus novias.
64. Los sacerdotes fueron muertos por la espada, y sus viudas no pudieron hacer duelo por ellos.
65. Finalmente, nuestro Señor se levantó como despertando de un sueño profundo. Como soldado borracho salió gritando,
66. forzó al enemigo a retroceder. Venció a sus enemigos, causándoles para siempre profunda humillación.
67. Pero rechazó a la familia de José, y no aceptó a la tribu de Efraín.
68. En lugar de ellos eligió a la tribu de Judá y a su querido monte Sion.
69. Construyó su santuario en lo alto de ese monte, y lo afirmó para siempre al igual que la tierra.