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Salmos 40:11-16 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

11. No seas tacaño, SEÑOR, con tu compasión. Que tu fiel amor y fidelidad me guarden para siempre.

12. Porque se me han venido encima muchas desgracias. Mis pecados me han atrapado y no puedo escapar de ellos. Son tantos los pecados que he cometido, que he perdido todo el valor.

13. SEÑOR, por favor rescátame. ¡SEÑOR, ven pronto a ayudarme!

14. Que todos los que buscan destruirme terminen sintiéndose avergonzados y humillados. Que los que quieren hacerme daño se retiren sin lograr nada.

15. Que los que se burlan de mí retrocedan avergonzados.

16. Y que los que buscan tu ayuda, encuentren dicha y felicidad. Que los que aman tu salvación puedan alabarte siempre diciendo: «¡Cuán grande es el SEÑOR!»

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