1. Van pensando los insensatos sin tener presente a Dios. Se han corrompido y cometen crímenes horribles. No hay ni uno que haga el bien.
2. El SEÑOR observó desde el cielo a los seres humanos para ver si había alguien que fuera sabio y buscara seguir a Dios.
3. Pero todos se habían alejado de Dios; todos se habían vuelto perversos. No hay ni uno que haga el bien. ¡Ni uno solo!
4. ¿Acaso son tan ignorantes los perversos, esos que devoran a mi pueblo como si fuera pan? ¡Nunca buscan al SEÑOR!