1. Dios de mi alabanza, no guardes silencio ante mis oraciones.
2. La gente mala dice mentiras de mí y me calumnia.
3. Me atacan sin razón y dicen chismes de mí.
4. En pago de mi amor, me calumnian; pero yo oro.
5. El bien que les hice me lo pagan con mal; me dieron odio a cambio de mi amor.
6. Dijeron lo siguiente: «Que pongan su caso a cargo de un defensor perverso; que el que está a su lado sea un acusador.
7. Que se use en su contra la oración que dijo; que lo encuentren culpable.
8. Que muera pronto y que otro tome su cargo.
9. Que sus hijos queden huérfanos y su esposa viuda.
10. Que sus hijos queden sin hogar y rebusquen entre las ruinas de su casa.
11. Que se presenten sus acreedores y le quiten todas sus pertenencias; que gente extraña le quite todo lo que ganó en su vida.
12. Que nadie tenga compasión de él ni se compadezca de sus hijos huérfanos.
13. Que se destruya a su descendencia, que su apellido se acabe en una sola generación.
14. Que el SEÑOR recuerde los pecados que cometió su papá, y nunca borre el pecado de su mamá.
15. Que el SEÑOR recuerde siempre esos pecados; que él y su familia queden para siempre en el olvido.
16. »Porque nunca hizo nada bueno; persiguió a muerte a los pobres, a los afligidos y a los necesitados.
17. Como se complacía en maldecir a otros, que la maldición caiga sobre él; y como no le deseaba bendición a otros, que la bendición esté fuera de su alcance.
18. Que la maldición lo cubra como cuando se pone un vestido; que se le pegue como el aceite, que se pone en el pelo;
19. que lo cubra como un manto, que lo oprima continuamente como un cinturón».
20. Que así les pague el SEÑOR a los que me acusan, a los que hablan mal de mí.
21. Pero a mí, Señor DIOS, trátame lo mejor posible por causa de tu prestigio; rescátame por tu fiel amor.
22. Yo soy pobre y necesitado, tengo el corazón herido.
23. Me desvanezco como una sombra que desaparece; me siento como un insecto que la gente espanta.
24. Me tiemblan las rodillas por el ayuno; cada día estoy más flaco y me siento débil.
25. La gente se burla de mí; me ven y menean la cabeza.
26. ¡SEÑOR, ayúdame! Sálvame conforme a tu fiel amor.
27. Así, esa gente sabrá que esto es obra tuya; que fuiste tú, SEÑOR, quien me salvó.
28. Que ellos maldigan, pero tú bendigas; que se levanten, pero caigan en vergüenza, y yo, tu siervo, me alegraré.
29. Que mis enemigos queden avergonzados; que los cubra un manto de vergüenza.
30. Agradeceré al SEÑOR y lo alabaré delante de todos.
31. Lo alabaré porque él está siempre de lado del pobre y lo salva de quienes lo condenan.