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Jeremías 8:5-12 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

5. Entonces, ¿por qué este pueblo sigue alejándose de mí? ¿Por qué Jerusalén siempre está alejándose de mí? Se creen sus propias mentiras; no quieren volver a mí.

6. He escuchado con atención; lo que ellos dicen no es cierto. No hay ni uno que se arrepienta de su maldad y diga: “¿Qué es lo que he hecho?” Todos ellos siguen su propia carrera, como caballo que se lanza a la batalla.

7. Hasta la cigüeña en el cielo conoce sus estaciones; la tórtola, la golondrina y la grulla saben cuándo es hora de emigrar. Pero mi pueblo no presta atención a la ley del SEÑOR.

8. »¿Cómo es que ustedes dicen: “Tenemos las enseñanzas del SEÑOR así que somos sabios”? Pero en verdad los escribas mentirosos han distorsionado su significado.

9. Pero esos sabios quedarán en ridículo, acobardados y atrapados. Ellos han rechazado las enseñanzas del SEÑOR, entonces, ¿qué sabiduría es esa?

10. Por eso, les daré sus esposas a otros hombres, y sus tierras a otros dueños. Porque desde el más chico hasta el más grande andan viendo a ver qué se roban. Los profetas y los sacerdotes son todos unos estafadores.

11. Porque curan las heridas de mi pueblo de manera superficial, y dicen: “Todo quedará en paz, tranquilos”, cuando en realidad todo está mal.

12. ¿Acaso les ha dado vergüenza por las cosas horrendas que han hecho? No les ha dado vergüenza de nada, ni siquiera saben lo que es avergonzarse. Por eso caerán junto con todos los demás; cuando castigue a los otros, ellos también caerán». Es la decisión del SEÑOR.

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