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Jeremías 50:3-17 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

3. Porque una nación del norte se ha levantado contra Babilonia para dejarla convertida en un desierto. Todos, seres humanos y animales, huirán y nadie volverá a vivir allí.

4. »En esos días, por ese tiempo, dice el SEÑOR, el pueblo de Israel junto con el pueblo de Judá vendrán llorando buscando al SEÑOR su Dios.

5. Preguntarán por el camino de Sion y se irán hacia allá, diciendo: “Vengan y unámonos al SEÑOR en un pacto eterno, que jamás se olvidará”.

6. »Mi pueblo ha sido como un rebaño extraviado; sus pastores lo descarriaron y lo dispersaron por las montañas. Han ido de monte en monte y se han olvidado de su corral.

7. Los que lo encontraban, lo devoraban; sus enemigos decían: “No somos culpables, porque ellos pecaron contra el SEÑOR, su lugar de descanso; contra el SEÑOR, la esperanza de sus antepasados”.

8. »Huyan de Babilonia, salgan de ese país. Sean como los machos cabríos que guían a las ovejas.

9. Porque yo voy a levantar contra Babilonia una alianza de naciones poderosas del norte. Se alistarán contra ella y desde allí la conquistarán. Sus flechas serán como diestros guerreros, que no vuelven con las manos vacías.

10. Saquearán a los babilonios, y sus saqueadores se saciarán. Es la decisión del SEÑOR.

11. »Porque ustedes se alegraron, gozaron destruyendo mi propiedad. Salten como novilla en el potrero, relinchen como caballos sementales.

12. Pero su mamá quedará humillada, la que los dio a luz quedará en vergüenza. Será la última de las naciones, hecha un desierto, sequedal y páramo.

13. Debido al enojo del SEÑOR no será habitada, sino que quedará completamente desierta. Todo el que pase por allí quedará impresionado al ver todas las heridas que recibió.

14. »¡A sus posiciones, arqueros, alrededor de Babilonia! ¡Tiren contra ella y no ahorren flechas, porque ha pecado contra el SEÑOR!

15. Rodéenla y griten: ¡Babilonia se rinde! Caen sus torres, se derrumbaron sus murallas. Esta es la venganza del SEÑOR; vénguense de ella y háganle a ella lo mismo que ella les hizo a otros.

16. Aniquilen al que siembra en Babilonia y al que usa la hoz en la cosecha. Ante la espada del opresor, cada cual volverá a su pueblo, cada uno a su tierra.

17. »Israel es un rebaño descarriado, dispersado por leones. Primero se lo devoró el rey de Asiria, y después Nabucodonosor, rey de Babilonia, lo que hizo fue roerle todos los huesos».

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