15. Porque el SEÑOR viene como un fuego y sus carros como una tormenta para castigar con su furia y darles escarmiento con llamas de fuego.
16. Porque el SEÑOR castigará con fuego y con su espada a toda la humanidad. El SEÑOR matará a muchos.
17. «Los que se santifiquen y purifiquen en los jardines sagrados siguiendo a uno que va en medio, los que comen carne de cerdo, ratas y otras cosas asquerosas, encontrarán su fin todos juntos». El SEÑOR lo ha decidido así.
18. »Yo conozco los hechos y los pensamientos de ellos. Vengo a reunir a gente de todas las naciones e idiomas. Vendrán y verán mi gloria.
19. »Haré una señal entre ellos y enviaré algunos sobrevivientes a las naciones: a Tarsis, Pul, Lidia (famosa por sus arqueros), Mésec, Tubal y Grecia, a países lejanos que nunca han oído de mí ni han visto mi gloria. Ellos les contarán acerca de mi gloria entre las naciones.
20. Traerán a mi monte santo, como una ofrenda al SEÑOR a todos sus paisanos israelitas desde todas las naciones. Vendrán a Jerusalén a caballo, en carros, en literas, en mulas y en camellos». El SEÑOR lo ha decidido así. «Será como cuando los israelitas traen al templo del SEÑOR una ofrenda de cereal en un recipiente limpio.
21. A algunos de ellos los haré sacerdotes y levitas». El SEÑOR lo ha decidido así.
22. «Porque así como los nuevos cielos y la nueva tierra que yo voy a hacer durarán para siempre», dice el SEÑOR, «así también durarán tus descendientes y tu nombre.
23. Toda la humanidad vendrá a adorar delante de mí de Luna nueva a Luna nueva y de día de descanso a día de descanso». El SEÑOR lo ha decidido así.
24. «Ellos saldrán a ver los cadáveres de la gente que se rebeló contra mí, porque el gusano que los consume no morirá y el fuego que los devora no se apagará. Serán algo repulsivo para toda la humanidad».