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Génesis 37:29-36 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

29. Cuando Rubén regresó al pozo, se dio cuenta de que José ya no estaba adentro, entonces rasgó su ropa para mostrar su tristeza.

30. Después regresó donde estaban sus hermanos y dijo: —¡El muchacho ya no está! ¿Qué vamos a hacer?

31. Los hermanos mataron una cabra, agarraron la túnica de José y la mancharon con sangre.

32. Después los hermanos le llevaron la túnica larga con mangas al papá y le dijeron: «Encontramos esto, mira a ver si es la túnica de tu hijo».

33. Jacob la reconoció y dijo: «Sí, esta es la túnica de mi hijo, lo devoró un animal salvaje; con seguridad José quedó despedazado».

34. Luego Jacob rasgó su vestido, se puso ropa áspera y por mucho tiempo estuvo de luto por su hijo.

35. Todos sus hijos e hijas fueron a consolarlo, pero él rehusaba ser consolado y decía: «Voy a estar de luto por mi hijo hasta el día en que me muera». Así hizo duelo por su hijo.

36. Mientras tanto, los madianitas vendieron a José en Egipto, a Potifar, el capitán de la guardia del faraón.

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