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Génesis 27:11-27 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

11. Entonces Jacob le dijo a Rebeca, su mamá: —Mira, mi hermano Esaú es un hombre muy velludo y yo no.

12. Es probable que mi papá me toque, va a pensar que soy un engañador y me va a maldecir en lugar de bendecirme.

13. Entonces la mamá le dijo: —Que cualquier maldición que te haga caiga sobre mí en lugar de sobre ti. Haz lo que te pido, y tráeme las cabras.

14. Jacob fue, las agarró y se las llevó a su mamá. Ella preparó una comida deliciosa, tal como le gustaba a Isaac.

15. Después Rebeca tomó la mejor ropa que tenía Esaú, su hijo mayor, y se la puso a Jacob, su hijo menor.

16. También tomó las pieles de las cabras y las puso en los brazos y cuello de Jacob.

17. Además, le dio a su hijo Jacob la deliciosa comida y el pan que ella había preparado.

18. Jacob fue a donde estaba su papá y le dijo: —Papá. Isaac respondió: —Aquí estoy. ¿Cuál de mis hijos eres tú?

19. Jacob respondió: —Soy Esaú, tu hijo mayor. Hice lo que me pediste, recuéstate y come la carne del animal que cacé para ti, para que así me des tu bendición.

20. Pero Isaac le dijo a su hijo: —¿Como hiciste para cazar tan rápido este animal? Jacob respondió: —Porque el SEÑOR tu Dios, me ayudó a hacerlo.

21. Luego Isaac le dijo a Jacob: —Hijo mío, acércate que te quiero tocar para saber si en verdad tú eres mi hijo Esaú.

22. Jacob se acercó a su papá, él lo tocó y dijo: —Tu voz parece la de Jacob, pero tus brazos se sienten como los de Esaú.

23. Isaac no lo reconoció porque los brazos estaban velludos como los de su hermano Esaú, entonces lo bendijo.

24. Le dijo: —¿En verdad eres mi hijo Esaú? Jacob respondió: —Sí, soy yo.

25. Luego Isaac dijo: —Tráeme un poco de carne para que la coma y te dé mi bendición. Jacob se la trajo, y él la comió. También le trajo vino, y él lo bebió.

26. Después su papá, Isaac, le dijo: —Acércate y dame un beso, hijo mío.

27. Jacob se acercó y le dio un beso. Isaac le olió la ropa y lo bendijo. Isaac dijo: «Miren, el olor de mi hijo es como el olor de un campo que el SEÑOR ha bendecido.

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