Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Éxodo 8:5-23 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

5. El SEÑOR le dijo a Moisés: —Dile a Aarón: “Toma tu bastón y extiende tus brazos sobre los ríos, canales y lagunas y llena de ranas todo Egipto”.

6. Entonces Aarón extendió su brazo sobre las aguas de Egipto, llegaron las ranas y cubrieron todo Egipto.

7. Pero los magos hicieron uso de sus hechizos y lograron hacer lo mismo. Trajeron más ranas a las tierras de Egipto.

8. Luego el faraón mandó llamar a Moisés y Aarón y les dijo: —Oren para que el SEÑOR saque esas ranas de aquí. Sólo así voy a dejar que el pueblo vaya a ofrecerle sacrificios al SEÑOR.

9. Moisés le dijo al faraón: —Tú decides cuándo quieres que ore por ti, por tus servidores y por tu pueblo para que así se vayan las ranas de sus casas y sólo permanezcan metidas en el Nilo.

10. —Mañana —dijo él. Luego Moisés dijo: —Que se haga como tú dices, así te darás cuenta de que no hay ningún otro como el SEÑOR, nuestro Dios.

11. Las ranas se irán de tu casa, de las de tus servidores y de las de tu pueblo; se meterán al río y ahí se quedarán.

12. Moisés y Aarón dejaron al faraón. Moisés le oró al SEÑOR para que se llevara las ranas que había enviado en contra del faraón.

13. El SEÑOR hizo lo que Moisés le pidió. Las ranas se murieron en las casas, los patios y los campos.

14. Los egipcios amontonaron las ranas muertas y la tierra comenzó a apestar.

15. Cuando el faraón vio que ya no había ranas, se puso terco y no los quiso escuchar, tal como el SEÑOR había dicho.

16. El SEÑOR le dijo a Moisés: —Dile a Aarón: “Extiende tu bastón y toca el polvo de la tierra, el cual se convertirá en mosquitos que se esparcirán por todo Egipto”.

17. Así lo hicieron. Aarón tomó su bastón, extendió su brazo y tocó el polvo de la tierra. Este se convirtió en mosquitos que picaron a la gente y a los animales. En Egipto todo el polvo sobre la tierra se convirtió en mosquitos.

18. Los magos intentaron crear más mosquitos, pero no lo lograron y los mosquitos picaron a la gente y a los animales.

19. Los magos dijeron: «Esto es obra de Dios». Pero el faraón se puso terco y no los quiso escuchar, tal como el SEÑOR había dicho.

20. El SEÑOR le dijo a Moisés: —Ve a encontrarte con el faraón por la mañana, cuando él baje al río y dile: “El SEÑOR me envió a decirte: ‘Deja libre a mi pueblo para que me adore.

21. Si no lo haces, voy a mandar nubes de moscas a ti, a tus servidores, a tu pueblo y a tu casa; también mandaré moscas a los campos donde trabajan.

22. Pero cuando lo haga voy a tratar de manera diferente a la tierra de Gosén, donde vive mi pueblo, para que allá no haya moscas. De esta manera te podrás dar cuenta de que yo, el SEÑOR, estoy en esta tierra.

23. Trataré en forma diferente a mi pueblo y al tuyo. Mañana llevaré a cabo esta señal’”.

Leer capítulo completo Éxodo 8