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Éxodo 4:8-20 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

8. —Si no te creen con la primera señal, te creerán con la segunda.

9. Si no te creen ni te ponen atención con la segunda señal, toma un poco de agua del río Nilo y derrámala sobre el suelo seco. El agua que saques del Nilo se convertirá en sangre al tocar el suelo.

10. Moisés le dijo al SEÑOR: —Por favor, Señor, nunca he sido de fácil palabra, ni antes ni después de que me hablaras a mí, tu siervo. Soy lento y aburrido cuando hablo.

11. El SEÑOR le dijo: —¿Quién es el que le dio boca al ser humano? ¿Quién es el que hace que una persona sea sorda, muda, coja o ciega? Pues Yo, el SEÑOR.

12. Ve que yo estaré contigo cuando hables y te enseñaré lo que debes decir.

13. Pero Moisés dijo: —Por favor, Señor, manda a otro.

14. Entonces el SEÑOR se enojó con Moisés y le dijo: —Está bien. Te voy a dar a alguien para que te ayude, a tu hermano Aarón de la tribu de Leví. Él sabe hablar muy bien y ya viene en camino a visitarte. Se pondrá muy feliz de verte.

15. Habla con él y cuéntale lo que quieres que él diga. Yo estaré contigo y con él cuando hablen y les enseñaré lo que deben hacer.

16. Él hablará al pueblo por ti, será como tu voz y tú serás para él en lugar de Dios.

17. Lleva el bastón que tienes en la mano, pues con él vas a hacer las señales.

18. Moisés fue a Jetro, su suegro y le dijo: —Por favor, déjame regresar a Egipto, pues quiero ir a mi pueblo para ver si todavía viven. Jetro le dijo a Moisés: —Vete en paz.

19. Luego mientras Moisés aún estaba en Madián, el SEÑOR le dijo: —Ya puedes regresar a Egipto, pues ya han muerto todos los que querían matarte.

20. Entonces Moisés llevó a su mujer y a sus hijos en un burro y regresó a Egipto, llevando el bastón de Dios en la mano.

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