Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Deuteronomio 5:21-24 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

21. »No codicies a la esposa de tu semejante, ni desees su casa, ni su tierra, ni su esclavo, ni su esclava, ni su buey, ni su burro, ni nada de lo que él tenga.

22. »El SEÑOR nos ordenó estos mandamientos con voz fuerte para toda la congregación en el monte, desde el fuego, la nube y la espesa niebla. No dijo nada más, las escribió en dos tablas de piedra y me las dio.

23. »Cuando escucharon la voz desde la oscuridad, mientras el monte ardía en fuego, se acercaron a mí todos los líderes de sus tribus y sus ancianos.

24. Ustedes dijeron: “Mira, el SEÑOR nuestro Dios nos mostró su gloria y su grandeza, y escuchamos su voz que provenía del fuego. Hoy hemos visto que Dios puede hablarle a una persona y que esta puede seguir viviendo.

Leer capítulo completo Deuteronomio 5