12. »Y ahora, Israel, ¿qué es lo que te pide el SEÑOR tu Dios? Solamente que respetes al SEÑOR tu Dios, que vivas como él dice, que lo ames y que sirvas al SEÑOR tu Dios de todo corazón y con toda el alma;
13. y que cumplas todos los mandamientos del SEÑOR y las leyes que hoy te doy para tu propio bien.
14. »Mira, al SEÑOR tu Dios pertenecen los cielos, incluso los cielos más altos, y la tierra y todo lo que hay en ella.
15. Aun así, el SEÑOR sintió amor por tus antepasados. Tú eres descendiente de ellos y tanto te amó que te eligió a ti en lugar de elegir a cualquier otra nación, tal como puede verse hoy.
16. »Circunciden su corazón quitándose sus actitudes paganas y dejen de ser tercos,
17. porque el SEÑOR tu Dios es el Dios de todos los dioses y el Señor de todos los señores. Él es grande, poderoso y terrible. Él no tiene favoritismos ni acepta sobornos.
18. Él se encarga de hacer justicia a las viudas y a los huérfanos. Él ama al inmigrante que habita contigo y le da comida y ropa.
19. Tú también debes amar al inmigrante, porque fuiste inmigrante en la tierra de Egipto.
20. »Obedece al SEÑOR tu Dios. Sírvele, sé fiel a él y haz promesas en su nombre.
21. Alábalo sólo a él, él es tu Dios. Él hizo por ti esos milagros grandes y temibles que has visto con tus propios ojos.
22. Tus antepasados eran sólo setenta cuando se fueron a Egipto y ahora el SEÑOR tu Dios los ha hecho tan numerosos como las estrellas del cielo.