1. David preguntó: —¿Queda alguno de la familia de Saúl a quien yo pueda beneficiar en memoria de Jonatán?
2. Los siervos de David mandaron llamar a un siervo llamado Siba de la familia de Saúl. El rey David le preguntó: —¿Tú eres Siba? Y Siba dijo: —Sí, yo soy su siervo Siba.
3. El rey dijo: —¿Queda alguien más aquí de la familia de Saúl a quien yo pueda beneficiar en el nombre de Dios? Siba le dijo al rey David: —Jonatán tiene un hijo que está tullido de ambos pies.