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1 Samuel 30:15-24 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

15. David le dijo al egipcio: —Guíanos hasta encontrar a esos bandidos. El egipcio le contestó: —Lo llevaré, pero jure por Dios que no me matará ni me entregará de nuevo a mi amo.

16. El egipcio los guió hasta donde estaban los amalecitas. Los encontraron dispersos por el suelo, comiendo y bebiendo, festejando el gran botín que habían tomado del territorio filisteo y de Judá.

17. David los atacó y los mató. Pelearon desde el amanecer hasta el anochecer del siguiente día. Ninguno de los amalecitas logró escapar, excepto por cuatrocientos hombres que se montaron en sus camellos y huyeron.

18. David recuperó el botín que habían tomado los amalecitas, inclusive a sus dos esposas.

19. No faltaba nada. Encontraron a todos los niños y ancianos, y también a todos sus hijos e hijas, y todas sus pertenencias valiosas.

20. David se apoderó de las ovejas y el ganado. La gente llevaba todo al frente y decía: «¡Este es el botín de David!»

21. David regresó al arroyo de Besor, donde se habían quedado los doscientos hombres que estaban débiles y cansados para seguirlo. Los hombres salieron al encuentro de David y los soldados que lo habían acompañado.

22. Entre los hombres que habían acompañado a David, había algunos que eran malos y problemáticos, y reclamaron: —Estos hombres no fueron con nosotros, así que no tenemos por qué compartir el botín con ellos. Que tomen sólo a sus esposas e hijos.

23. David les dijo: —No, hermanos míos, no hagan eso. Piensen en lo que el SEÑOR les dio. Él nos permitió derrotar al enemigo que nos atacó.

24. Nadie les hará caso. Todo se repartirá en partes iguales entre los hombres que se quedaron a cuidar de las provisiones y los que fueron a la batalla.

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