1. Ustedes, los ricos, lloren y giman a la vista de las calamidades que se les van a echar encima.
2. Su riqueza está podrida; sus vestidos están apolillados.
3. Hasta su oro y su plata están siendo presa de la herrumbre, que testimoniará contra ustedes y devorará sus cuerpos como fuego. ¿Para qué amontonan riquezas ahora que el tiempo se acaba?
4. Miren, el salario defraudado* a los jornaleros que cosecharon los campos que les pertenecen a ustedes está clamando, y sus clamores han llegado a los oídos del Señor del universo.
5. Ustedes han vivido con lujo en la tierra, entregados al placer; con ello se han engordado para el día de la matanza.