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Lucas 20:18-25 La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

18. Todo el que caiga sobre esa piedra, se estrellará, y a quien la piedra le caiga encima, lo aplastará.

19. Los maestros de la ley y los jefes de los sacerdotes comprendieron que Jesús se había referido a ellos con esta parábola. Por eso trataron de echarle mano en aquel mismo momento; pero tenían miedo del pueblo.

20. Así que, siempre al acecho, enviaron unos espías que, bajo la apariencia de gente de bien, pillaran a Jesús en alguna palabra inconveniente que les diera la ocasión de entregarlo al poder y a la autoridad del gobernador romano.

21. Le preguntaron, pues:— Maestro, sabemos que todo lo que dices y enseñas es correcto y que no juzgas a nadie por las apariencias, sino que enseñas con toda verdad a vivir como Dios quiere.

22. Así pues, ¿estamos o no estamos nosotros, los judíos, obligados a pagar tributo al emperador romano?

23. Jesús, dándose cuenta de la mala intención que había en ellos, les contestó:

24. — Muéstrenme un denario. ¿De quién es esta efigie y esta inscripción?

25. Le contestaron:— Del emperador.Entonces Jesús dijo:— Pues den al emperador lo que es del emperador, y a Dios lo que es de Dios.

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