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Lucas 10:22-30 La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

22. Mi Padre lo ha puesto todo en mis manos y nadie sabe quién es el Hijo, sino el Padre; y nadie sabe quién es el Padre, sino el Hijo y aquellos a quienes el Hijo quiera revelárselo.

23. Luego se volvió hacia sus discípulos y les dijo aparte:— ¡Felices los que puedan ver todo lo que ustedes están viendo!

24. Les digo que muchos profetas y reyes quisieron ver lo que ustedes están viendo, y no lo vieron; y oír lo que ustedes están oyendo, y no lo oyeron.

25. Por entonces, un doctor de la ley, queriendo poner a prueba a Jesús, le hizo esta pregunta:— Maestro, ¿qué he de hacer para alcanzar la vida eterna?

26. Jesús le contestó:— ¿Qué está escrito en la ley de Moisés? ¿Qué lees allí?

27. Él respondió:— Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con toda tu inteligencia; y a tu prójimo como a ti mismo.

28. Jesús le dijo:— Has respondido correctamente. Haz eso y vivirás.

29. Pero el maestro de la ley, para justificar su pregunta, insistió:— ¿Y quién es mi prójimo?

30. Jesús le dijo:— Un hombre* que bajaba de Jerusalén a Jericó fue asaltado por unos ladrones, que le robaron cuanto llevaba, lo hirieron gravemente y se fueron, dejándolo medio muerto.

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