22. El comandante despidió al muchacho, advirtiéndole:— No digas a nadie que me has informado sobre este asunto.
23. Seguidamente llamó a dos oficiales y les dio estas instrucciones:— Hay que salir para Cesarea* a partir de las nueve de la noche. Tengan preparada al efecto una escolta compuesta por doscientos soldados de infantería, setenta de caballería y doscientos lanceros.
24. Preparen también cabalgadura para Pablo y llévenlo sano y salvo ante Félix, el gobernador.