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Apocalipsis 19:20-21 La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

20. Pero la bestia fue hecha prisionera, y con ella el falso profeta, el que, realizando prodigios a favor de la bestia, había logrado seducir a cuantos se dejaron tatuar la marca de la bestia y adoraron su imagen. Ambos fueron arrojados vivos al lago ardiente de fuego y azufre.

21. Los demás fueron exterminados por la espada del jinete del caballo blanco —la espada que sale de su boca— y todas las aves rapaces se hartaron de sus carnes.

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