Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

2 Timoteo 1:6-9 La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

6. Por eso, te recuerdo el deber de reavivar el don que Dios te otorgó cuando impuse mis manos sobre ti.

7. Porque no es un espíritu de cobardía el que Dios nos otorgó, sino de fortaleza, amor y dominio de nosotros mismos.

8. Así que no te avergüences de dar la cara por nuestro Señor y por mí, su prisionero; al contrario, sostenido por la fuerza de Dios, sufre juntamente conmigo por la propagación del mensaje evangélico.

9. Dios es quien nos ha salvado y nos ha llamado a una vida consagrada a él, no porque lo merecieran nuestras obras, sino porque tal ha sido su designio conforme al don que se nos ha concedido por medio de Cristo Jesús antes que el tiempo existiera.

Leer capítulo completo 2 Timoteo 1