1. Al maestro del coro. Según “No destruyas”. Poema de David. Cuando Saúl envió a vigilar su casa para matarlo.
2. Dios mío, líbrame de mis enemigos,protégeme de mis agresores;
3. líbrame de los malhechores,sálvame de los sanguinarios
4. que están acechando mi vida.Me atacan, Señor, los poderosossin que yo haya cometido falta ni pecado;
5. corren y se preparan contra mísin que yo tenga culpa alguna.¡Despierta, sal a mi encuentro, mírame!