1. Igualmente hay quien se hace a la mary, al tener que surcar las enfurecidas olas,invoca a un trozo de maderamás frágil que la nave que lo lleva.
2. El ansia de lucro concibió la nave,y la sabiduría del armador la construyó.
3. Pero es tu providencia*, Padre, la que dirige el navío;porque tú abriste camino en el mismo mary trazaste una senda segura en medio de las olas.