Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Levítico 22:1-11 La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

1. El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:

2. — Informa a Aarón y a sus hijos de los casos en que deben mantenerse apartados de las ofrendas sagradas que me hacen los israelitas, para no profanar mi santo nombre. Yo soy el Señor.

3. Diles: Todo descendiente de sus futuras generaciones que se acerque en estado de impureza a las ofrendas sagradas que los israelitas consagran al Señor, será extirpado de mi presencia*. Yo soy el Señor.

4. Todo descendiente de Aarón que sea leproso o padezca cualquier tipo de flujo, no comerá de las cosas sagradas hasta que se purifique. El que toque cualquier cosa contaminada por haber estado en contacto con un cadáver o con quien haya tenido derramamiento de semen,

5. o quien haya tocado cualquier reptil causante de impureza al que lo toque, o el que entre en contacto con alguien que le comunique su impureza,

6. esa persona quedará impura hasta la noche y no podrá comer de las ofrendas sagradas si antes no se ha bañado.

7. Cuando se ponga el sol, recuperará el estado de pureza y entonces podrá comer las ofrendas sagradas que le corresponden como alimento.

8. No comerá animal muerto, ni que haya sido despedazado por las fieras, para no contaminarse con ello. Yo soy el Señor.

9. Deben, pues, cumplir mis normas para no incurrir en pecado y tener que morir por haberlas profanado. Yo, el Señor, soy el que los santifico.

10. Ningún extraño comerá de las ofrendas sagradas: ni el huésped del sacerdote ni el jornalero podrán comerlas.

11. Pero cuando el sacerdote compre algún esclavo, este podrá comer de ellas, así como también podrá comer de su alimento el nacido en su casa.

Leer capítulo completo Levítico 22