12. Hay algunos que llevan cetro, como si fueran el juez de un país; pero si alguien los ofende, no pueden condenarlo a muerte.
13. Otros llevan en su diestra un puñal o un hacha, pero no pueden librarse a sí mismos de la guerra ni de los bandidos.
14. A la vista está que no son dioses; no les tengan ningún temor.
15. Esos dioses que han instalado en sus templos son tan inútiles como una vasija rota
16. y tienen los ojos llenos del polvo que levantan los pies de los que entran allí.