Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Génesis 31:6-16 La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

6. Ustedes saben muy bien que yo he trabajado para su padre con todas mis fuerzas;

7. a pesar de ello, él me ha engañado y me ha estado cambiando continuamente el salario. Sin embargo, Dios jamás le permitió que me hiciese mal alguno;

8. al contrario, cuando Labán decía: “te voy a pagar con los corderos moteados”, todas las ovejas del rebaño parían corderos moteados; y cuando decía: “te voy a pagar con los rayados”, entonces todas parían crías rayadas.

9. Así Dios le ha ido quitando el ganado al padre de ustedes y me lo ha ido dando a mí.

10. Una vez, durante el período en que los animales estaban en celo, yo tuve un sueño. De pronto vi que los machos que cubrían a las ovejas eran todos rayados, manchados o moteados.

11. Y en el sueño, el ángel de Dios me dijo: “Jacob”. Yo le respondí: “Aquí estoy”.

12. Y él me dijo: “Echa una mirada y verás cómo todos los machos que cubren a las ovejas son rayados, manchados o moteados, porque he visto todo lo que Labán te ha estado haciendo.

13. Yo soy el Dios de Betel, el lugar donde ungiste una piedra votiva y me hiciste una promesa. Márchate, pues, de aquí y regresa a la tierra que te vio nacer”.

14. Raquel y Lía le respondieron:— ¿Tenemos nosotras acaso parte o herencia en la casa de nuestro padre?

15. Al contrario, nos ha tratado como si fuésemos extrañas. No solo nos vendió, sino que además se ha gastado el dinero que recibió por nosotras.

16. Por tanto, toda la riqueza que Dios le ha quitado a nuestro padre es nuestra y de nuestros hijos. Así que haz todo lo que Dios te ha dicho.

Leer capítulo completo Génesis 31