Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Ezequiel 16:22-37 La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

22. Con todas tus abominaciones y prostituciones no te acordaste de cuando eras una niña y estabas desnuda del todo, de cuando te revolcabas en tu sangre.

23. Y aparte de todas estas infamias ¡ay de ti! —oráculo del Señor Dios—,

24. te construiste un prostíbulo y en todas las plazas te hiciste un altar.

25. Erigiste tus altares en los cruces de todos los caminos, deshonrando tu hermosura, y te abrías de piernas a todo el que pasaba, agravando así tu conducta de prostituta.

26. Te prostituiste con los egipcios, esos vecinos tuyos de enormes genitales, y agravaste tu conducta de prostituta con ánimo de provocarme.

27. Entonces extendí mi mano contra ti, reduje tu ración y te puse a merced de tus enemigas las filisteas, que se avergonzaron de tu conducta inmoral.

28. Te prostituiste con los asirios, pues por lo visto no habías tenido suficiente, y aun así no te hartaste.

29. Agravaste tu conducta de prostituta en tierra de comerciantes, en Caldea; y ni aun así te hartaste.

30. ¡Qué enfebrecido tiene que estar tu corazón —oráculo del Señor Dios— para hacer todas estas cosas, acciones propias de una prostituta empecinada,

31. para construir tu prostíbulo en los cruces de todos los caminos y para erigir tu altar en todas las plazas! Pero no fuiste como la prostituta profesional, pues despreciabas tu paga.

32. La esposa adúltera, que prescinde de su marido, acepta regalos;

33. a todas las prostitutas se les paga lo convenido. Tú, en cambio, hacías regalos a todos tus amantes y los atraías con mercedes para que vinieran de los alrededores a fornicar contigo.

34. Te ha ocurrido lo contrario que a las demás mujeres pues, como nadie ha ido tras de ti solicitándote, has sido tú la que ha pagado en lugar de recibir lo convenido. ¡Justo al revés!

35. Por tanto, prostituta, escucha la palabra del Señor.

36. Esto dice el Señor Dios: Por haber puesto al descubierto tu sexo y haber enseñado tu desnudez al fornicar con tus amantes (esos ídolos abominables a los que ofreciste la sangre de tus hijos),

37. pienso reunir a todos los amantes que complaciste, a los que amabas y a los que odiabas. Te los reuniré de los alrededores y descubriré tu desnudez ante ellos para que contemplen tus vergüenzas.

Leer capítulo completo Ezequiel 16