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Éxodo 32:9-17 La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

9. El Señor continuó diciendo:— Me estoy dando cuenta de que este pueblo es muy testarudo.

10. Déjame, pues, que descargue mi ira contra ellos y los aniquile. Y tú serás el que dé origen a una gran nación.

11. Entonces Moisés intentó aplacar el furor del Señor, su Dios, diciendo:— Señor, ¿por qué vas a descargar tu ira contra tu pueblo, el mismo en favor del que hiciste uso de tu gran fuerza y poder para sacarlo de Egipto?

12. ¿Acaso vas a permitir que los egipcios digan: “Con malos fines los sacó Dios; lo hizo para matarlos en las montañas y borrarlos de la faz de la tierra”? No te dejes llevar por la ira y renuncia al castigo que pensabas para tu pueblo.

13. Acuérdate de tus siervos Abrahán, Isaac e Israel, a quienes hiciste solemne promesa diciendo: “Multiplicaré su descendencia como las estrellas del cielo y daré a sus descendientes como herencia perpetua la tierra de la que les he hablado”.

14. Entonces el Señor renunció a aplicar el castigo con que había amenazado a su pueblo.

15. Moisés se volvió y descendió del monte trayendo en sus manos las dos losas del testimonio. Estaban escritas por ambos lados, por delante y por detrás.

16. Las losas y la escritura que había grabada en ellas eran obra de Dios.

17. Cuando Josué escuchó el griterío del pueblo, dijo a Moisés:— Se escuchan gritos de guerra en el campamento.

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