33. Los egipcios apuraban al pueblo, para que saliese del país cuanto antes, pues decían: “Vamos a morir todos”.
34. El pueblo recogió la masa de harina aún sin fermentar y, junto con las artesas, la envolvieron en mantas y se la echaron al hombro.
35. Además, obedeciendo las órdenes de Moisés, les pidieron a los egipcios objetos de oro y plata, y vestidos.
36. El Señor hizo que los israelitas se ganasen el favor de los egipcios, que les dieron todo cuanto les pedían. Así fue como despojaron a los egipcios.
37. Los israelitas partieron de Ramsés en dirección a Sucot*; eran más de seiscientos mil hombres de a pie, sin contar los niños.
38. Además partió con ellos una enorme muchedumbre de gente con gran cantidad de ovejas y vacas.
39. Como la masa que sacaron de Egipto no llegó a fermentar, la cocieron e hicieron panes sin levadura, pues al tener que salir precipitadamente, expulsados por los egipcios, no tuvieron tiempo de hacer otras provisiones para el viaje.