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Ester Griego 3:8-13e La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

8. Y dijo Amán al rey Asuero:— Entre todos los pueblos que forman las provincias de tu imperio existe uno que vive separado y disperso; se rige por leyes diferentes a las de los otros pueblos y no obedece las leyes del rey. No creo que convenga al rey tolerarlos.

9. Por lo tanto, si al rey le parece bien, emita un decreto para exterminarlos, y yo contribuiré con diez mil talentos de plata a la hacienda real para realizar esta labor.

10. Entonces el rey se quitó el anillo y se lo dio a Amán, hijo de Hamdatá, de la región de Agag, enemigo de los judíos,

11. diciendo:— Puedes quedarte con la plata, y haz con ese pueblo lo que mejor te parezca.

12. El día trece del mes primero fueron convocados los secretarios reales. Estos redactaron en la escritura de cada provincia y en la lengua de cada pueblo, todo lo que Amán ordenaba a los sátrapas reales, a los gobernadores de cada una de las provincias y a los jefes de cada pueblo. Todo se escribió en nombre del rey Asuero y se selló con el anillo real.

13. Luego, los mensajeros llevaron estos documentos a todas las provincias del reino con la orden de destruir, matar y exterminar en un solo día, el día trece del duodécimo mes, es decir el mes de Adar, a todos los judíos, jóvenes y ancianos, niños y mujeres, y de apoderarse de todos sus bienes.]

13a. Esta es la copia del decreto:“El gran rey Artajerjes, a los gobernadores de las ciento veintisiete provincias que se extienden desde la India hasta Etiopía, y a los funcionarios que están a sus órdenes:

13b. Aun siendo como soy el rey de tantas naciones y soberano del mundo entero, no quiero que mi poder me llene de soberbia. Por el contrario, trato siempre de gobernar a mis súbditos con suavidad y clemencia, procurando que disfruten de una vida sosegada para que el reino prospere, y la paz, por la que todos suspiran, esté asegurada hasta las últimas fronteras.

13c. Habiendo consultado a mis consejeros de qué modo podría esto lograrse, uno de ellos, llamado Amán, que ocupa el segundo lugar en el reino y destaca sobre sus colegas por su prudencia y fidelidad,

13d. nos manifestó que, confundido entre los demás pueblos del mundo, hay uno cuyas leyes se oponen a las de cualquier otra nación: es un pueblo que desobedece los decretos reales y pone obstáculos a la buena marcha de nuestro irreprochable gobierno.

13e. Hemos entendido que ese pueblo es el único que está en contra de todo el mundo: tiene leyes extrañas, vive de forma diferente a los demás, se muestra hostil a nuestros intereses, desprecia nuestros decretos y, cometiendo los peores delitos, hace peligrar la estabilidad de nuestro gobierno.

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