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2 Reyes 4:8-14 La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

8. Un día Eliseo pasó por Sunán y una mujer rica que vivía allí le insistió para que se quedase a comer. Desde entonces, cada vez que pasaba por allí, se detenía a comer.

9. La mujer dijo a su marido:— Mira, creo que ese que nos visita cada vez que pasa es un profeta santo.

10. Vamos a construirle en la terraza una habitación pequeña con una cama, una mesa, una silla y un candil, para que se aloje en ella cuando venga a visitarnos.

11. Un día que Eliseo llegó allí, subió a la terraza y se acostó en la habitación.

12. Luego dijo a su criado Guejazí:— Llama a esa sunamita.Él la llamó y cuando se presentó ante él,

13. Eliseo ordenó a su criado que le dijese:— Ya que te has tomado todas estas molestias por nosotros, dinos qué podemos hacer por ti. ¿Necesitas pedir algo al rey o al jefe del ejército?Pero ella respondió:— Vivo a gusto entre mi gente.

14. Eliseo insistió:— ¿Qué podríamos hacer por ella?Entonces Guejazí sugirió:— No sé. No tiene hijos y su marido es viejo.

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